El Sistema de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento de La Piedad (SAPAS), en su afán por recuperar y aprovechar el agua que se pierde en fugas no visibles a través de las redes hidráulicas, instaló equipos de tecnología de vanguardia para vigilar el flujo de los caudales en las tuberías.
Se trata de un sistema de monitoreo (telemetría) de las redes de distribución que transmite información vía remota de la cantidad de agua y presión existente a un centro de comunicación.
Consistió en colocar 66 registradores de datos (datalogger) a través de los cuales se captura y envía la información al sistema digital. También se instalaron 93 transmisores de presión, válvulas reguladoras de presión, de admisión y expulsión de aire, así como tres medidores de caudal; esto distribuido en varios puntos de la ciudad y en algunas comunidades a las que se brinda el servicio.
En las zonas donde hay servicio 24 horas se colocaron pilotos controladores para la regulación de presiones y así tener una distribución más eficaz; se construyeron y adecuaron cajas de registro donde se instalaron los equipos. El proyecto incluyó el software, hardware, licencias y capacitación al personal.
El registro de la presión, y en especial del volumen, permite comparar los datos capturados tanto en los puntos de extracción como los que se generan en el ingreso y salida de los tanques de almacenamiento y finalmente con los que registran los medidores en las tomas domiciliarias.
Con estas acciones, SAPAS La Piedad podrá tener un conocimiento más preciso de la cantidad agua que se extrae, se almacena, se distribuye y se consume, así como la presión con la que se brinda este servicio.
En caso de que existan diferencias muy marcadas entre estos parámetros, con los datos arrojados por los sistemas se podrán tomar las mejores decisiones y actuar de manera en que se resuelvan los problemas identificados, ya sea falla en equipos o fugas de agua en líneas de abastecimiento, de tal forma que se afecte lo menos posible a la población y evitar pérdidas de agua. De igual manera ayudará a programar mantenimientos preventivos en los equipos, todo encaminado a la recuperación de las fuentes de agua que abastecen al municipio.
El director del organismo operador, Jorge Rubio Olivares, indicó que se han realizado esfuerzos importantes en la dependencia en materia de agua, y un resultado de esto es que la extracción de agua es prácticamente la misma que hace 20 años con una población mucho mayor que en ese entonces.
“Las acciones que realizamos están enfocadas a mejorar los servicios, la atención y garantizar el vital líquido a la población a largo plazo”, señaló el funcionario, quien destacó a los gobiernos municipales y en especial la participación ciudadana como piezas clave en la obtención de estos resultados.
“Desde SAPAS trabajamos incansablemente para que la gente cuente con un buen servicio en cantidad y calidad, pero también pedimos la colaboración de la ciudadanía para que haga usos responsables del agua y tome consciencia de cómo la gasta”, finalizó.
Por último mencionar que esta obra se llevó a cabo a través del Programa de Desarrollo Integral de Organismos Operadores (PRODI) en la que se invirtieron 5 millones de pesos, con aportación Federal de la Comisión Nacional del Agua y la contraparte municipal del SAPAS.